por Rocío del Cerro | Nov 1, 2017 | Imagen, Marca corporativa, RSC, Sin categoría, Sociedad y comunicación
Hace unos años, pocos, recuerdo que entré en un despacho y me dijeron… “no te pago por pensar, te pago por hacer lo que yo digo…” Quizá me dejaría llevar por el ego si dijera que mi idea era fantástica, pero era fan, era una idea destinada a hacer mejor algo, según mi saber y entender…
Quizá las empresas y los empresarios no tienen tiempo para atender todas las ideas que se les ocurre a los trabajadores, o quizá si… si piensan que el trabajo colaborativo suele dar grandes frutos.
Piense un momento, si cuatro ojos ven más que dos, cuánto más verán los de un grupo de trabajadores. Vuelva a pensar, si usted hace publicidad en redes, cuánto mejoraría la viralidad de sus mensajes y su marca corporativa si sus trabajadores también estuvieran interesados en clickear lo que su social media pone…
Hagamos un intento más, imagine que las cosas no van bien, quizá sería de agradecer que los propios trabajadores se implicaran en aumentar las ventas de la empresa, hablando bien de ella, hablando de los productos….
Hay trabajadores que van de ocho a tres y otros que van de nueve a nueve … y a pesar de vivir de…, en…, entre…, para…, por…, según…, su empresa, con horarios muy claros o con horarios de esos que se dicen “de siempre a siempre” son currantes de una empresa a la que no quieren.
Nadie obliga a querer a su empresa, nadie y menos en un mundo como el actual plagado de ERES, despidos en viernes o contratos de días y horas. Nadie obliga, pero lo que si es cierto es que las empresas que consiguen crear fans, trabajan mejor, tienen mayores beneficios, mayor visibilidad, una marca corporativa más consolidada y unas marcas personales, las de sus trabajadores, más capaces de brillar con luz propia y de revertir mayores ganancias, relaciones y creatividad a la propia empresa.
El concepto de trabajador como embajador de marca es cada vez más importante, toda vez que el siglo XXI es el de la sociedad de la información, la sociedad en red y los trabajadores tienen también sus propias redes sociales. Si hace unos años las relaciones con la empresa se dilucidaban sobre todo en las grandes asambleas de trabajadores, hoy las voces de los trabajadores se ven en Internet.
Un buen embajador de marca es aquel que está contento de trabajar en la empresa y lo dice, es aquel que coincide con la misión y los valores de la empresa para la que trabaja y lo muestra, es aquel que se siente a gusto y lo resalta, es la empresa que sabe respetar y sacar brillo al talento de sus trabajadores y lo destaca.
Recuerde que un embajador es un representante de un país en otro, un embajador de marca es un portavoz de su empresa en el exterior. Y puede ejercer su embajada de muchas maneras, en las redes, en las conversaciones con los amigos o como portavoz de su empresa en certámenes o en los medios de comunicación. Pero además los embajadores contaban en sus países lo que veían en el extranjero, eran grandes networkers y sabían establecer alianzas para que los intereses de sus países de origen fueran respetados. Como embajadores de marca, los grandes profesionales pueden ponerle en contacto con perfiles de vanguardia, perfiles únicos, empresas con las que establecer alianzas.
Últimamente también están destacando con fuerza la personalidad y la fuerza de los embajadores de marca en las iniciativas de responsabilidad social corporativa. Desde Rocío del Cerro Comunicación trabajo con grandes empresas en iniciativas sociales destinadas a mostrar sus valores.
Bien, pues cuando son los trabajadores mismos los que hablan de su empresa, la credibilidad y la presencia de éstas en los medios crece. Ilunion Hotels tiene por ejemplo muchos embajadores de marca, trabajadores que participan en diversos eventos deportivos como #somosheroes y que hacen que la sociedad vea reflejado en ellos los valores que propugna la propia empresa: el éxito de las capacidades diferentes, la fuerza del trabajo en equipo… Bien pues cada trabajador que ha participado es un embajador de la marca Ilunion Hotels. Míralo, en el vídeo donde se recoge la aventura de los trabajadores de Ilunion Hotels haciendo el camino de Santiago en bicicleta. Llevan el logo, hablan de su empresa, unen los valores de la misma a los valores del deporte, presentan una imagen positiva, alegre, llena de vida. https://youtu.be/FMT8i649W2A
Convertir a los trabajadores de su empresa en embajadores de marca, habla de inteligencia, de respeto y de ganas de sumar fuerzas. El liderazgo desde la cúspide, caracterizado por el ordeno y mando… ya no tiene cabida. El mundo de la empresa necesita un liderazgo más transversal, con multitud de portavoces haciendo más grande el mensaje y más viral la presencia. Ya no hay una tele hay muchas y hay muchos canales multimedia, influencers, blogs… De hecho, hay empresas que están comenzando a dar clases y argumentarios a sus trabajadores para que puedan hablar de determinados aspectos de la empresa. Los hay que simplemente alientan a los suyos a hacer piña entorno a la empresa. Por fin existe el convencimiento de que el fin de la empresa es vender, sí; pero también retener el talento… y eso lo hace mejor un trabajador que piensa, que otro al que se le paga por no pensar.
“No te pago por pensar”, esta frase no solo era una bofetada de mala educación, sino que eran ganas de tirar por la borda puntos de vista que podrían tenerse en cuenta…, incluso para desecharlos.
Ahora que el mundo de la empresa ha cambiado tanto, que a veces no hay lugares físicos de trabajo, ni compromiso para toda la vida, sino solo proyectos; los curritos son también embajadores de los productos, de la forma de trabajar de la empresa, de lo que hay dentro de ella. Ahora que la publicidad de las teles puede eludirse a golpe de mando, tener un embajador de marca, es importante. Lo mire por donde lo mire.
por Rocío del Cerro | Ago 31, 2017 | Comunicación, Formación, Marca corporativa, Marca personal, Redes Sociales, Sociedad y comunicación
Después de un mes de vacaciones. Bueno, después de unos días de vacaciones. Vale, después de una escapada de vacaciones y unos meses en los que realmente has tenido más tiempo para pensar, has llegado a la misma conclusión que yo, tienes que echarle más ganas al departamento de comunicación de tu empresa. Un departamento os digo siempre, que puede estar formado por muchas personas o por ti mismo, que puede tener mucho o poco presupuesto, pero que tiene que tener siempre pasión, conocimiento y creatividad.
Bien después de estos días de más o menos paz, ya te has dado cuenta qué es lo que funciona y no funciona en tu empresa. Desde Rocío del Cerro Comunicación voy a repasarlo contigo.
- Si eres emprendedor o empresario, repasa tu imagen corporativa, qué vendes y cómo lo vendes. Cuál es tu valor. Analiza cuáles son tus puntos fuertes e incide en ellos y cuáles son los que más vale la pena olvidar. Si necesitas ayuda, pregunta, compara y si puedes, buscar un asesor.
- La página web, la dejaste tirada en junio porque estabas cansado y porque en verano total…. Vale, pues subsana el error. El verano es la gran fecha para remodelar, rehacer, tirar, poner nueva página web con todos los nuevos proyectos y líneas de negocio que tendrás en el próximo curso escolar. ¡¡¡¡ Hazla ahora, ahora!!! Quita las fotos anticuadas, hazla más eficaz, más fácil, más intuitiva, que se pueda visionar desde el teléfono o la Tablet.
- Vuelve a mirar tu marca personal, si, si, tu marca personal. Qué vendes, cómo lo vendes, cómo lo explicas, cómo te vistes, cómo gesticulas, con qué presentación, con qué tarjetas, en qué te diferencias, vender por valor o por precio…. ¿Sabes por qué las tiendas cambian de escaparate? Claro que lo sabes. Porque si están antiguas, de la temporada pasada, y llenos de porquería, no venden. ¿Tú cómo estás? ¿Estás dejado? Necesitas vídeos, fotos, mensajes contundentes, frases … formación, retos nuevos.
- La comunicación de tu empresa depende de ti. Guarda tiempo para analizarla, para crear, para mantener contacto con la gente, para leer. Este año deja atrás la frase de que como trabajas tanto no puedes quedar con nadie, ni ver la tele, ni leer un libro, ni ir a una exposición ni a un teatro. El mundo se mueve deprisa, no te llenes de caspa, no dejes que tu negocio se quede metido contigo en tu cueva sin ventilación y sin ventanas al exterior. Para explicar, vender, mostrar… hay que saber por dónde se mueve el mundo, qué claves utiliza, qué cosas nuevas puedes aportar. Aprende a ser una esponja para aprender de los que más saben. Muévete por las calles más creativas de la ciudad, fíjate en cómo viste, habla y se mueve la gente que podría ser tu posible cliente. Conócelo.
- Limpia tus redes profesionales de todas las fotos de verano que no son exactamente las fotos que te van a ayudar a proyectarte mejor, vender más, dar a conocer tus ideas. Todos tenemos fotos muy personales y familiares… que no tienen porqué aparecer en nuestras redes profesionales. Pon tus mejores fotos, no cualquier foto. Pon tus comentarios, pero no solo esos sobre la expulsión de no sé quién en un partido de futbol, o de no sé cuántos en una determinada situación que el resto del mundo desconoce.
- Hazte Knowmad. Quizá no tienes tiempo ni dinero para un gran curso, pero si para hacerte una educación a tu medida, de forma gratuita, en internet. Ponte charlas y películas. Mira que hace la competencia. Hazte fan de TED, aprende a hacer mil cosas. Reciclados, no es solo el título de mi libro, es una forma de vida que puedes seguir. Hay veces en que te reciclas o mueres de aburrimiento, de asco, de pena….
- La comunicación es como su nombre indica una unión entre dos partes, una puesta en común. Atrévete a interactuar con tus clientes y socios de una forma diferente a través de las redes. Ponte más en su lugar y adapta tu mensaje, tus ofertas, tus productos y tus ideas a sus necesidades, su forma de hablar, su forma de ser… déjate de anglicismos, latinajos y expresiones que puedan alejarte de un comprador, y utiliza todos ellos para acercarte a un socio o un director de proyectos. Adáptate, como los bichos, para que tu negocio sobreviva. Si hay que enseñar el negocio, foto; si hay que acercarlo, video; si hay que explicarlo, palabra…si hay que indicarlo, mapa.
- Siéntate con tus recuerdos de verano, y piensa que es lo que más y lo que menos te ha gustado. De los viajes, de las experiencias, de los buenos y los malos servicios se aprende mucho. Piensa cómo conociste ese hotel, quién te hablo de tal o cual restaurante, porqué fuiste allí y no aquí… y comenzarás a aprender de comunicación mucho más de lo que crees. La comunicación es un oficio que se aprende, se cuida, se lima y se le saca brillo cada día.
- Mira a ver como hablan de ti tus amigos, para qué te buscan y sabrás mucho más de tu marca personal y de tus habilidades. De lo que dicen los clientes, de lo que dicen tus amigos, tu familia, de lo que hace la competencia vas a aprender mucho, muchísimo. Encontrarás ideas, encontrarás argumentario. Encontrarás los pequeños detalles que te harán diferente. Has oído hablar de los Big Data, los datos que te aportan información esencial para tu negocio. Bien pues trata también los Little Data, los pequeños comentarios…
- Proponte mimar tu comunicación interna y te verás a ti mismo cuidando mucho más de ti. Eres cómo te hablas, de lo que hablas… Toda acción es primero una idea que se explica con palabras. Todo tu futuro es un propósito que se explica con palabras; Tú eres tu ángel y tu demonio y te lo dices con palabras. Mejora tu comunicación interna, trátate mejor y el resto también lo hará.
En comunicación se comienza por un paso, un buen paso y se termina con una buena carrera hacia el éxito.
por Rocío del Cerro | Jul 4, 2017 | Comunicación, Marca corporativa, Marketing, Ventas
Ahora que se lleva tanto la operación biquini para adelgazar yo te propongo la operación comunicación para engordar las cifras de tu negocio. Hoy pondré como ejemplo tu negocio de turismo rural.
Fíjate que el verano no solo es el momento de llenar tu negocio sino de sentar las bases para que también en invierno esté lleno. En un curso que ofrecí hace unos días para el ministerio de Medio Ambiente insistía en la importancia de la comunicación, de hacernos visibles, de poner en el escaparate tu negocio de turismo rural. Repasamos varias ideas, muchas ideas, pero sobre todo hablé de la necesidad de incorporar la comunicación al día a día de nuestro negocio. La utilidad de ser visible, la vieron en el minuto uno, la pregunta vino después ¿cuánto tiempo se tarda en todo esto?
Uno de los grandes retos del turismo rural es la cantidad de trabajo que supone, que en su gran mayoría lo lleva una sola persona, o una pareja que tiene otras actividades principales. Y claro, es demasiado trabajo y la comunicación parece un lastre. No lo es. Realmente, la comunicación es el escaparate, es lo que va a hacer que un negocio se vea, se escoja y se disfrute, o que pase desapercibido para el común de los mortales.
Les decía y lo mantengo que una vez que tengáis establecida la página web y las redes, mantener la comunicación de una forma eficaz no lleva más allá de las cuatro horas semanales.
Ahora que es época de vacas gordas en muchos establecimientos de turismo rural, haz una buena base de datos con los clientes, apunta quienes son, qué cosas te han pedido, qué les interesa, edad, región, hijos, idioma… esto te dará pie para saber qué es lo que debes poner y quitar de tu página web. Invítales a hacer vídeos de sus vacaciones en tus instalaciones, a que te mandes comentarios (buenos) a través de las redes sociales … a fomentar la unión entre ellos y tu establecimiento.
Como la hormiga, durante el verano haz acopio de historias y de contactos, conviértete en una esponja de lo que pasa a tu alrededor. Te vendrá bien para hacer tu comunicación en invierno. Una buena web, que sea muy visual, con posts que cambien todas las semanas y unas buenas redes son suficientes. A ello tendrás que sumarle una consulta semanal a las plataformas de turismo donde tengas alojada tu web, las centrales de reserva, las páginas de turismo del ayuntamiento y la comunidad, etc.
Te darás cuenta de tener una página web exige tenerla al día. Poner determinados posts, subir fotos. ¿Cuánto tardas en escribir 20 líneas? Pongamos que no tienes práctica y te cuesta una hora escribir 20 líneas. Elegir una foto buena hecha por ti, puede llevarte 10 minutos. Subirla porque te haces lío al principio media hora. En algo más de hora y media puedes tener tu página semanalmente renovada. En ella puedes ofrecer actividades, promociones, fiestas en el destino, ferias, etc. Para conseguir agilidad, pide que cuando te hagan tu página, te enseñen a utilizarla, para que no seas rehén de quien te la hizo. En Rocío del Cerro Comunicación trabajamos con expertos que diseñan la página, pero lo que es más importante, te enseñan a utilizarla y están contigo en los primeros pasos.
Las redes sociales, Twitter, Instagram y Facebook no te llevarán más de 20 minutos, sobre todo si utilizas herramientas que te permita n programar de una vez para varias redes y días. Herramientas que como Hootsuite son gratuitas y te ayudan a aligerar el trabajo. En ellas puedes subir comentarios, fotos, videos de tus clientes o los tuyos propios. Hacer vídeos de 15 segundos con el móvil… te terminará enganchando… y no es difícil.
Todavía te quedará algo más de media hora a la semana para responder a los comentarios de tus clientes y hacer egosurfing, es decir poner el nombre de tu establecimiento y saber cuál es el estado de tu reputación digital, es decir, qué se dice de ti. Y tomar medidas.
Si a las cuatro horas de comunicación quieres añadirle un extra de marketing, manda a tus clientes según tu base de datos segmentada, ofertas que pueden interesarle. Esto puede llevarte un par de horas más, pero también supondrá un plus en tu cuenta de resultados, ya que ofrecerás muchas novedades, como “rutas del vino”, “senderismo de noche para conocer las estrellas”, etc. Es decir, muchas de las ideas que has desarrollado para los distintos post y que te pueden servir como reclamo para conseguir más reservas.
En Rocío del Cerro Comunicación nos encanta ofrecer ideas para mejorar la visibilidad de tu negocio de turismo rural; de hecho, este ha sido el tercer año consecutivo que he ofrecido este curso. Comprometidos con tu visibilidad. Nos encanta estar a tu lado para contarlo.
por Rocío del Cerro | Ene 9, 2017 | Comunicación, Marca corporativa, RSC, Sociedad y comunicación
Se lo vienen barruntando los jefes, ceos y demás directivos de las grandes empresas, el futuro de los negocios pasa no solo por tener unas cuentas saneadas, sino por ser sanos y empáticos 100% transparentes, 150% agradecidos y responsables para devolver a la sociedad parte de sus ganancias. En una sociedad con tanto por hacer, con administraciones que no pueden o saben correr con todos los gastos, son las empresas las que mediante el patrocinio ayudan en muchas causas sociales.
Les avanzaba en el último post que la comunicación y el patrocinio van a tener en los próximos años un enorme recorrido. Con el año recién empezado, en Rocío del Cerro Comunicación estamos realizando servicios de consultoría a empresas que están estableciendo nuevas estrategias en comunicación, nuevas formas de llegar más y mejor a los clientes, aunar beneficios fiscales y sociales poniendo en marcha labores de patrocinio. Ya no se trata solo de tener un storytelling convincente, es decir una historia que dé autoridad, fantasía, y establezca empatía con el público para que éste quiera buscar tu empresa; ahora de lo que se trata es de practicar el storydoing, un paso más, es el hacer y mostrar. Un storydoing que no solo busque poner en imágenes una acción que logre que el video de nuestra empresa sea viral, sino una historia en la que tu empresa haga de verdad algo bueno, algo que demuestre que su misión y sus valores son algo más que palabras. No cuentes una buena historia, haz una buena historia, implícate en las historias de la gente, patrocina las causas que les ocupan y les preocupan. No hagas clientela, haz sociedad. Te sorprenderá ver el eco que recibes y cómo se consolidan en tu marca corporativa o personal los ideales que defiendas en el patrocinio.
Ya sabes qué es lo que el cliente puede hacer por ti, pero ¿tú sabes qué es lo que puedes hacer por tu cliente? Ser bueno se ha convertido en leit motiv de la responsabilidad social de las empresas, pero también en baza importante de sus campañas de publicidad. Cada vez son más las empresas que buscan unir los valores de su empresa con valores universalmente reconocidos como la ayuda, la investigación, la lucha contra la discriminación racial o de género… Y cada vez hay más medios que buscan esos contenidos para contarlo, llenar sus parrillas de radio, de tele, o sus páginas de prensa escrita y digital… porque cada vez hay más interés por leerlo, verlo, escucharlo. Muchos programas de televisión comienzan por esa frase: espacio patrocinado por…; muchas causas sociales comienzan de la misma manera.
Se trata de una realidad poliédrica: hablamos de ayuda, hablamos también de publicidad en medios y hablamos también de exenciones fiscales, aunque este sea un apartado que llevan los servicios jurídicos o financieros.
En nuestro aparatado de comunicación ¿cuáles son los puntos que una empresa debe tener en cuenta para convertirse en patrocinador de cara a obtener visibilidad? Después de muchos años trabajando en los medios y para los medios de comunicación, en Rocío del Cerro Comunicación sabemos que:
- Deben coincidir la visión y los valores de patrocinio y patrocinador. Ausonia es un referente en la lucha contra el cáncer y su minuto más de investigación…. El #Reto Pelayo Vida en el que he estado trabajando es una forma de visibilizar la situación de miles de mujeres que se quedan atrapadas y bloqueadas por un cáncer y que deciden demostrar que después del cáncer hay mucha vida. La fundación Vencer el Cáncer es un referente que lucha por encontrar fondos con los que seguir investigando.
- Deben ofrecer un producto interesante. No solo consiste en ser bueno, sino en hacer que la historia merezca ser contada. Ninguna empresa patrocinará un programa si este no interesa a la audiencia. En un mundo infoxicado, con tantas posibilidades de ofrecer y encontrar contenido, solo las historias que valen la pena son recogidas por la prensa. Todos sabemos que la empresa que ofrece ayuda no solo se siente empujado a hacerlo por su deseo de ayudar sino también por su deseo de ser reconocido y publicitado en prensa. Es verdad que hay empresas que ayudan y no quieren salir en prensa, pero son las menos. La mayoría de los photocall, coches, aviones, barcos y camisetas están llenos de logos de empresas que colaboran en una u otra actividad.
- Deben saber muy bien el tiempo y el lugar en el que quieren ser reconocidos. La Navidad es como saben la gran estación de los patrocinios, pensando en los niños, en los mayores, los desamparados…los que más lo necesitan.
- Cuando las labores de ayuda o patrocinio las realizan los propios trabajadores, como en el caso de Gaes donde trabajadores voluntarios viajan con ONGs y ponen audífonos a niños de “las zonas más desamparadas del planeta” como ellos mismos escriben, se consigue además crear un espíritu único de empresa y de ayuda de todos ellos. Hice un reportaje en el que vi cómo se apoyaban y daban consejos unos a otros, cómo se narraban las historias de las caras y las lágrimas de los niños que escuchaban por primera vez la voz de su madre. Les vi unidos por una causa y no solo por un trabajo. Eso no es solo contar, es hacer… y es mostrar, también. Y es llegar al corazón, y el interés del cliente. Y mejorar el clima de la empresa.
En Rocío del Cerro Comunicación sabemos mucho de todo ello, realizamos consultoría y ponemos en marcha campañas de comunicación, programas, y eventos que tienen que ver con el patrocinio. En esto como en todo, no todo vale. Absténganse los amigos del postureo, y piensen en el patrocinio aquellos que saben que uno puede ayudar y contar su realidad empresarial desde la veracidad y la responsabilidad.
por Rocío del Cerro | Jun 1, 2016 | Marca corporativa, Marca personal
Tengo en casa un montón de tarjetas de visita, y muchas de ellas forman parte de un montón que no utilizo… salvo para ponerlas de ejemplo de “tiros al pie”.
He preferido poner la mía y no la de gente que me entrega alguna de estas que pongo en el montón, porque se puede hacer crítica constructiva sin señalar. Sin señalar ni llamarte por teléfono, ni por supuesto ponerte un email.
En un mundo en el que es más difícil a veces conseguir clientes que realizar el trabajo final, ¿Por qué dedicamos tan poco tiempo y tan pocas ganas a buscar clientes? En Rocío del Cerro Comunicación sabemos que una mala tarjeta es una ocasión de negocio perdida.
¿Qué me dices de estas tarjetas con todo tachado, porque ya no es el mismo teléfono y le hemos cambiado el nombre a la empresa? Son una tarjeta que pone, no me llames jamás. La cosa es también complicada cuando la persona en cuestión te escribe el nuevo nombre y el número de teléfono con una grafía nerviosa que no entiende ni él, y a cuyo descubrimiento no vas a dedicarle ni cinco minutos. Si hay mil médicos, cien abogados, cuatrocientos pintores ¿por qué te voy a llamar a ti, que no entiendo tu tarjeta?
Hay otros que utilizan unas letras de imprenta tan raras, que no sabes bien qué pone la tarjeta. Otras veces para cuando lo has descifrado te das cuenta de que el trabajo no valía la pena. El sujeto en cuestión es “facilitador holístico, experto en terapias alternativas”. A este sujeto ¿cuándo le llamas? Si no sé qué es, no sé cuándo lo necesito. Puede que quieras hacerte mil tarjetas para cada sector, pero lo mejor es que te hagas tarjetas generalistas muy claras y a buen precio, que te valgan para todos los públicos.
Las hay también de formas imposibles, que no se adaptan a ningún tarjetero y que terminan en las papeleras, y las hay por fin decoradas con un logo, en letra árabe o china que ni tú mismo sabes qué pone.
Aunque siempre defiendo que la mejor tarjeta de visita eres tú, lo cierto es que las de cartón también cuentan. Y si tu tarjeta tiene un nombre imposible, una dirección de email tan chiquitita que no puedo ver, unos teléfonos que ya no son, y una letra y una profesión que no puedo comprender… ¿para qué me vale?
En Rocío del Cerro Comunicación te asesoramos, te las diseñamos y te las mandamos a casa. Porque en la tarea de buscar clientes, no puedes confiar el trabajo a cualquiera.